Varios días completa la ocupación de hecho que por lo menos cincuenta familias del sector La Escalereta realizan sobre un predio como protesta por las demoras en la asignación de tierras por cuenta de Emgesa y el gobierno nacional.
Por: Juan J. Fajardo Cerquera – @vozdelaregion
Se cumplió en la vereda La Escalereta de El Agrado, la reunión conjunta entre las familias que reclaman de Emgesa el cumplimiento a compromisos de compensación mediante la asignación de tierras, las autoridades locales, la personería municipal y delegados de la Agencia Nacional de Tierras.
Tras varias semanas de protesta en la que familias del sector se declararon cansados de esperar infructuosamente por la solución de sus peticiones en la asignación de tierras, este martes se desarrollo lo que denominaron Mesa Temática para resolver dicha dificultad.
Al encuentro asistieron la alcaldesa de El Agrado Waldina Lozada Vega, Yina Fernanda Cerquera Mesa la personera municipal, además de delegados de Emgesa y la Agencia Nacional de Tierras ANT, con quienes los manifestantes expusieron sus preocupaciones por la falta de respuestas a la petición de contar con predios como compensación por las afectaciones que les produjo la inundación del embalse.
Aunque no se logró el levantamiento de la protesta, se concreto un nuevo encuentro la próxima semana en el que los seis alcaldes del centro del Huila harán presencia a fin de incorporarse a la oferta de terrenos que sirvan para reasentar a las cerca de 50 familias que aun no han sido reubicadas.
Una de las limitaciones para otorgar el titulo legal de los terrenos pretendidos por los agricultores en protesta, es la carencia de infraestructura para el suministro de agua tanto para los hogares como para los proyectos productivos que implica la reubicación.
Se indicó que existe la voluntad de resolver la dificultad, sin embargo, se dejó claro que la solución deberá ser integral a fin de evitar complicaciones a futuro.
Mientras se resuelve la dificultad, los labriegos ratificaron su decisión de permanecer en la ocupación pacifica del predio y las autoridades se comprometieron a garantizar sus derechos.