Varias horas estuvo secuestrado Duberney Montoya, el agricultor de 41 años residente en la vereda San Martin de Oporapa de quien su familia aseguraba, había desaparecido este lunes.
Por: Gisela Hurtado Celis – @giselahcelis
Una acción rápida que concluyó con el retorno a la libertad sano y salvo de Duberney Montoya, el agricultor de 41 años que sus familiares habían dado por desaparecido este lunes, fue la que se anunció en las últimas horas por parte de las autoridades en el sur del Huila.
El hombre de quien se afirmó se desempeña desde hace varios años como mayordomo en una finca de la vereda San Martin de Oporapa, había desaparecido la mañana de este lunes, cuando salió para uno de los cultivos a realizar labores agrícolas.
Según sus familiares, el no regreso del labriego al mediodía a tomar el almuerzo causo preocupación y fue así como realizaron una búsqueda en la zona sin hallar pistas de su paradero, inclusive bajaron al pueblo y se contactaron con amigos y familiares previendo que el hombre se encontraba realizando algunas diligencias, pero su búsqueda resultó infructuosa.
Al terminar el día y con mayor preocupación, recordaron como en días anteriores personas desconocidas habían llegado a la vereda y habían preguntado por los dueños de las fincas mas prosperas, razón por la cual la sospecha de un posible plagio se apodero de ellos.
Fue así como buscando el apoyo de las autoridades, pusieron el caso en conocimiento inicialmente de la Policía y luego del Grupo de Acción Unificada por la Libertad Personal (GAULA) del Ejército, quienes en coordinación con Agentes del Cuerpo Técnico de Investigaciones CTI de la Fiscalía, llegaron al sitio de la desaparición para indagar y recabar indicios que pudieran determinar el posible paradero del hombre.
Algunas horas de búsqueda, fueron suficientes para encontrar elementos personales del labriego y con ello además de la búsqueda de huellas en los caminos, sirvieron para iniciar el operativo que concluyó la tarde de este martes con el regreso del campesino sano y salvo a su hogar.
Una vez en libertad, el hombre les relató a las autoridades que fue abordado por tres individuos, quienes lo obligaron a descender de la motocicleta y a seguir con ellos por un camino de la zona con destino a la parte alta de la cordillera.
Tras varias horas de caminata y en momentos en que descansaban, el hombre aprovecho su habilidad y conocimiento de la región y tras un leve descuido de sus captores logró escapar y ser rescatado por los militares adscritos al Batallón de Infantería No. 27 Magdalena, quienes lo regresaron de nuevo a la comunidad.
Los motivos del secuestro tendrían alguna pretensión económica, indicaron fuentes militares al confirmar la libertad del labriego.